¿Quieres recibir una dosis de «deliciosidad» pastelera que te deje gorjeando como un ruiseñor enfundado en glaseado de azúcar? Entonces, tienes que darle un mordisco a la experiencia L’Atelier. Más que una pastelería, es un estandarte de la dulzura en Barcelona y, como no podía ser de otra forma, se ha colado en nuestra lista de sitios imprescindibles. En medio del ajetreo barcelonés, en la calle Viladomat, se encuentra este rincón donde los pasteles se elaboran con una meticulosidad que debería ser considerada arte. ¡Y es que sus maestros pasteleros trabajan más con el corazón que con las manos!
Aquí no encontrarás el típico pastelito de cajón, no señor. Premisas como la innovación y la sorpresa son sagradas: cada semana lanzan delicias frescas, tan novedosas que quedarán grabadas en tu paladar como canciones pegajosas en tu cerebro. Pero no te preocupes, todo sigue siendo tan exquisito que querrás tararear su sabor una y otra vez. Y por si esto fuera poco, buscan, persiguen y se obsesionan con la excelencia. Cada pedacito de sus creaciones es un estallido de calidad de la que seguramente habrías pensado que no existía en un mundo donde los unicornios no son reales.
Por último, pero no menos importante, puedes acompañar tu festín dulce con bebidas de alta calidad, las cuales te ofrecen un complemento divino para tu experiencia salivante. ¿El precio? Muy coherente para la aventura maravillosa que proporcionan, oscila alrededor de los 5€-10€. Así que no te lo pienses más, atrévete a sumergirte en el universo L’Atelier, donde el pastel es toda una religión.